Fuente: Expansion Twitter, Snap y Facebook
Las dos plataformas suben en Bolsa, impulsadas por los buenos resultados publicitarios,mientras que su gran rival se enfrenta a crecientes problemas regulatorios. Twitter, Snap y Facebook
La ecuación del éxito podría resumirse así: más usuarios y más tiempo de navegación es igual a más impactos publicitarios y, por lo tanto, más ingresos
Dejando a un lado la complejidad técnica que supone conectar en tiempo real a millones de personas en una misma plataforma, el negocio de las redes sociales es tremendamente sencillo. La ecuación del éxito podría resumirse así: más usuarios y más tiempo de navegación es igual a más impactos publicitarios y, por lo tanto, más ingresos. Al menos, esta es la narrativa que ha impuesto Facebook, como plataforma social hegemónica con más de 2.000 millones de usuarios en todo el mundo.
Y es que más allá del buen comportamiento de la empresa en los mercados -hoy Facebook está valorada en alrededor de 540.000 millones de dólares, ocho veces más que la suma de la capitalización de sus tres principales rivales (Twitter, Snap y Pinterest)-, el gran éxito de la tecnológica fundada por Mark Zuckerberg ha sido convencer a las marcas de que Facebook es el mejor lugar para invertir cada dólar en publicidad. Durante años, esto ha penalizado a sus competidores que han tenido que descubrir en este tiempo cómo prosperar a la sombra de un coloso. Y, por fin, parece que han encontrado la fórmula.
El precio de las acciones de Snap se ha triplicado en lo que va de año, hasta 14 dólares
El precio de las acciones de Snap se ha triplicado hasta 14 dólares, desde los 5,7 dólares del 2 de enero; mientras que en el caso de Twitter, las acciones de la compañía han subido un 40% en los últimos doce meses. Los inversores han premiado el fuerte incremento de los ingresos publicitarios que han registrado estas compañías en los últimos meses, fruto de la capacidad de las plataformas para crear sus propios nichos de usuarios.
De hecho, los ingresos de Twitter crecieron un 18% entre abril y junio, en comparación con el mismo periodo del año anterior, hasta los 841 millones. En el caso de la app de mensajería fundada por Evan Spiegel, impulsó sus ventas un 48%, hasta 388 millones de dólares.
Más importante todavía es la capacidad de Snap y Twitter para hacer crecer sus bases de usuarios después de haber registrado algunos problemas en el pasado. Después de un 2018 complicado, en el que Snap incluso perdió usuarios, la compañía sumó 13 millones de usuarios activos diarios en el segundo trimestre, un 7% más.
Además, se espera que la tendencia continúe: un informe de MoffettNathanson proyecta que la app ganará 9 millones de usuarios en el tercer trimestre, por encima de las previsiones de la compañía.
En el caso de Twitter, la plataforma de los 140 caracteres sumó cinco millones de usuarios activos diarios en el último trimestre, hasta 139 millones, un dato que la compañía publica desde febrero de este año y que, aseguran, no es comparable al sus competidores. “Otras empresas comparten una métrica más expansiva que incluye a personas que no ven anuncios”, explican desde la firma.
COMPETENCIA
Paradójicamente, el éxito de Twitter y Snap podría acabar beneficiando a su gran rival Facebook, en un momento de creciente presión sobre la red social. La tecnológica que dirige Zuckerberg se enfrenta a una investigación del Departamento de Justicia de EEUU por presuntamente limitar la competencia, así como a los ataques de la candidata demócrata a la Casa Blanca, Elizabeth Warren, que ha asegurado que en caso de alcanzar la presidencia obligaría a la firma a escindir sus negocios (WhatsApp e Instagram).
En este contexto, Facebook puede esgrimir los casos de Twitter y Snap como ejemplos de que su negocio no lamina el de sus competidores. Aunque, aun siendo cierto esto último, es innegable que ambas plataformas podrían ser mucho más grandes de no ser por las agresivas tácticas de su rival.
Snap, a la que Facebook intentó adquirir sin éxito, sufrió una fuerte desaceleración de su negocio a partir del verano de 2016.
Después de que su rival lanzara la función Stories, una versión muy similar de los vídeos efímeros de Snap. Mientras que Twitter vio eclipsado una de sus nuevas características más prometedoras, los vídeos en vivo a través de Periscope, con el lanzamiento de Facebook Live en el año 2015.
Por supuesto, no todo es culpa de Facebook. Spiegel, el fundador de Snap, descuidó a los usuarios de Android y fue responsable de un rediseño mal ejecutado de la aplicación, lo que empujó a muchos usuarios a Instagram. Twitter, por su parte, ha sufrido una rotación constante de ejecutivos. Esta es la tercera etapa de su fundador y consejero delegado, Jack Dorsey, en la empresa. Es responsable de emitir mensajes confusos a los anunciantes sobre la plataforma.
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